"Empieza el año que da título al éxito de ventas de Orwell. Si bien su vaticinio no se ha cumplido, a cambio se ha impuesto la realidad diaria: el terror nuclear.
(...)Década de 1810: el planeta albergaba aproximadamente mil millones de habitantes; para el albor del nuevo milenio con toda probabilidad la cifra rondará los seis mil millones. En el siglo XIX se proclamó con orgullo que era posible dar la vuelta al mundo en ochenta días; hoy basta con noventa minutos.
(...)
En cambio, hoy en día la erudicíón ha dejado de representar un sacrificio; si uno no lo sabe todo acerca de lo que habla, es por simple pereza. la auténtica virtud reside en ofrecer algo nuevo y original a partir de estos conocimientos previos. Los tomos de las enciclopedias son ladrillos que tanto pueden servir para levantar presidios como catedrales. Ya no es difícil saber, pero crear algo nuevo a partir de los datos sigue siendo tan arduo hoy como lo ha sido siempre.
(...)
Lincoln dijo que cumplidos los cuarenta cada hombre es responsable de su cara. En un sentido existencial eso es cierto: el hombre no es el que nace, sino el que se hace. Sin embargo a los ochenta, uno ya no es responsable de sus facciones: la personalidad y la conciencia discurren ajenas a las fuerzas que las conforman. 
(...)
La única protección eficaz contra la miseria es la modestia.
(...)
Algunas palabras tienen una fuerza destructora tan densa como el cianuro.
(...)
El valor de una obra no reside en la procedencia del ladrillo y las tejas con que se ha erigido, sino en lo que el autor construye con esos materiales.
(...)
En el océano se encuentra todo, hasta la patria.
(...)
A orillas del océano, bajo un cielo plúmbeo que presagia temporal, me quedo contemplando una vieja gaviota que, inmóvil, observa la costa: centinela del infinito. Las patas como sarmientos sostienen el cuerpo y el abundante plumaje; el pico duro y ganchudo, su arma acerada para batallas acuáticas y terrestres, corta el aire como un puñal, y dos ojillos de fulgor oscuro, uno en cada lado de la cabeza, miran simultáneamente a derecha e izquierda. No ve hacia el frente, no conoce otro horizonte que la perspectiva conjunta del hemisferio derecho e izquierdo. Es como el ideólogo que sólo sbe dividir la humanidad en dos categorías absolutas: la derecha o la izquierda. Sin embargo, es posible ver hacia delante... Para ello sólo es preciso tener dos dedos de frente y los ojos adecuadamente dispuestos.
(...)
La prueba de la democracia es el duelo; el bendito pueblo no juzga la capacidad política d elos candidatos, sino si son apuestos o no, si saben encontrar el punto flaco del contrincante y soltarle cuatro verdades, si saben actuar, cómo es su mímica, sus gestos...  Ese duelo de juglares me asusta.
(...)
En estos tiempos en que los satélites giran en torno a la Tierra a una velocidad de 38.000 km/h, el Star of India demuestra la extraordinaria capacidad que ha tenido el hombre cuando, con voluntad de hierro, ha emprendido un viaje por tierra y por mar, o incluso se ha propuesto dar la vuelta al planeta. No existen límites, excepto el propio ser humano.
(...)
La religión institucionalizada pierde justamente la esencia de la religión. Algo similar ocurre al institucionalizar la literatura y el arte: su esencia se evapora.
(...)
En California este clima es un intruso, un mocoso que se presenta sin avisar en casa de una familia burguesa de buenas costumbres y se comporta como un completo grosero, lanza escupitajos a la alfombra y suelta tacos.
(...)
Aristóteles. Durante veinte años recibió las enseñanzas de Platón, pero después decidió que la Forma era más fiable que la Idea. Sus escritos sobre lógica y metafísica me cansan, pero sus reflexiones acerca de la naturaleza me refrescan. Por ejemplo, cuando afirma que los peces también duermen. Eso sí que no lo sabía.
(...)
A veces me siento como un recuerdo de mí mismo.
(...)
Aristóteles (...) elogia a los gordos porque, según él, tienen "más humores" en el cuerpo.
(...)
Bertrand Rusell consideraba más legítimas las matemáticas que la misma realidad.
(...)
En general los mamíferos piensan que la propiedad privada es un derecho natural.
(...)
Chesterton: "The Universe is the most exquisite masterpiece ever constructed by nobody". (El Universo es la obra de arte más exquisita jamás construida por nadie.)
(...)
Las emisiones deportivas son la arteriosclerosis absoluta de una civilización.
(...)
En el supermercado de la muerte los clientes echan una  carrera en silla de ruedas. Algunos cadáveres se han vestido de gala. Lo aceptaré todo, excepto esto, la muerte consumista.
(...)
Venimos de la nada y desaparecemos en la nada. Lo demás son fantasmagorías infantiles.
(...)
Yo no sé nada. Entre mil millones de cuerpos celestes, innumerables, en un planeta se produce la reacción química que permite la vida. La conciencia se asienta en un organismo biológico. Lo demás son tonterías. 
(...)
La verdad es que me siento tentado a abandonar este mundo, porque ella [su mujer] no me necesita ni se da cuenta de mi presencia. 
(...)
Literalmente "exhaló el último suspiro". Me quedé durante media hora más junto a su lecho, contemplándola. no estaba seria ni hermosa, sólo diferente. Como si todo el maquillaje de la vida -ira, dolor, alegría, tristeza-, todo lo que reviste el rostro humano, se hubiera borrado. Sólo capté en ella serenidad y nobleza, dos rasgos que siempre quedan ocultos en la cara de los vivos.
(...)
Lo que quedó de ella, ese puñado de cenizas, desapareció en el Pacífico; millones de motas de polvo. Al menos es higiénico. El fuego y el agua son higiénicos. La idea de la putrefacción en la tierra, un cuerpo devorado por los gusanos... me repugna. Así todo es mejor. Desaparecer, sin ruido, es todo lo que uno puede hacer.
(...)
Esa situación vergonzosa es la vida, una ilusión grotesca.
(...)
La idea de la "literatura" me hastía. Las palabras no sirven más que para ocultar la realidad, no para revelarla.
(...)
La oficina de estadística de las Naciones Unidas ha emitido un informe según el cual, entre 1974 y 1986, el número de habitantes del planeta ha pasado de cuatro mil millones a cinco mil millones. en 1999 -según el mismo informe- alcanzará los seis mil millones.
(...)
A veces resuena el eco del verso de Babits: "Tal vez no sea gran cosa la muerte." Es posible. Acaso estaba en lo cierto, teniendo en cuenta que todo el mundo ha pasado por ello y  nadie ha presentado una queja a posteriori.
(...)
"Temer la muerte." Lo que temo es que la muerte sea aburrida."
 
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario